Brazos abiertos a la neurodiversidad: llega la plataforma swyvl XR

Gracias a la plataforma swyvl XR se podrá experimentar y comprender mejor cómo vive la población neurodivergente, lo que facilitará su inclusión.


La plataforma de simulación neurodivergente swyvl XR brindará a los usuarios experiencias de escenarios en el trabajo y otros lugares que simulan las experiencias de individuos neurodivergentes.

Un grupo diverso de personas en un entorno de oficina, con dos hombres con gafas de realidad virtual.

Drew Turney

18 de agosto de 2025

min. de lectura
  • Los espacios diseñados principalmente para usuarios neurotípicos suelen conllevar problemas añadidos para las personas neurodivergentes. 

  • swyvl es una plataforma de realidad extendida (RE) en fase de prefinanciación diseñada para comprender mejor a las personas neurodivergentes y empatizar con ellas. 

  • La plataforma proporcionará distintas escenas para que los usuarios experimenten el mundo como lo podría percibir una persona neurodivergente. 

  • La principal oferta de swyvl serán escenas experimentables en primera persona adaptadas a diversas plataformas, como cascos de realidad virtual, portátiles, dispositivos móviles y televisores. 

  • El modelo de negocio de swyvl contempla generar contenido accesible para el público general y contactar con profesionales de la salud mental para que utilicen el contenido de swyvl en su consulta y puedan monetizarlo. 

Durante buena parte de finales del siglo XX y comienzos del XXI, la sociedad se ha esforzado con ahínco en mejorar los aspectos legales y culturales relacionados con la inclusión. Como resultado, si bien no se ha erradicado totalmente del mundo laboral, la discriminación por género, raza, orientación sexual y religión se ha visto relegada y condenada. 

Sin embargo, existe otro tipo de alteridad apenas conocida, y mucho menos reconocida: las vivencias de la población neurodivergente en espacios creados por personas neurotípicas y pensados esencialmente para satisfacer sus propias necesidades. 

Puede que el parpadeo de una fuente de iluminación distraiga a un empleado, o que su compañera necesite sentirse en un entorno seguro a la hora de hablar en una reunión: “Puede haber un empleado en una oficina paisaje al que le moleste el ruido constante a su alrededor ―advierte el ingeniero Philipp Wolf, antiguo directivo de efectos visuales (VFX) en el sector de entretenimiento y director ejecutivo de swyvl―. Lo normal es que pregunte a sus superiores si puede ponerse auriculares, pero suelen responderle que va en contra de la política de empresa, así que no le dejan usarlos”. 

Algunos empleadores asumen que el hecho de que a un trabajador le moleste la luz, el ruido o la vehemencia con que sus compañeros expresan las ideas en voz alta se debe a presunción o capricho. El propio Wolf ha visto cómo lo acusaban de arrogancia y mala educación por no mirar directamente a sus interlocutores. 

Una mujer neurodivergente se ve afectada por el ruido constante y la actividad a su alrededor.
Existen diferentes tipos de neurodivergencia, como la sensibilidad extrema al ruido circundante, a las luces parpadeantes o a la excesiva vehemencia al expresarse ante los compañeros.

Pero, como le ocurre a él, esas personas también podrían ser neurodivergentes. Donde Wolf, por ejemplo, tiene dificultades para seguir la norma social de mirar a las personas a los ojos, otros podrían tener problemas para concentrarse en presencia de ruido ambiente o de luces parpadeantes. 

En vez de ignorar las preocupaciones de las personas neurodivergentes, incorporar algunas adaptaciones podría conseguir que el lugar de trabajo sea mejor para todos. Como apunta Wolf, es el mismo caso de la accesibilidad de los edificios: “No solo es útil para alguien que va en silla de ruedas, sino también para cualquier persona que transporte una carga pesada o que lleve a un bebé en un carrito”. 

Reconocer y adecuarse a los trabajadores neurodivergentes podría incidir notablemente en la cuenta de resultados de la organización. El Gobierno escocés descubrió en un informe de 2018 que pasar por alto la inclusión del personal neurodivergente podría costar unos 2200 millones de libras al año (unos 2500 millones de euros), de los cuales un 42 % correspondería a pérdida de productividad. Al extrapolar estos números al conjunto de la economía mundial, swyvl estima que el costo mundial en pérdida de productividad podría superar los 165 billones de euros anuales. 

¿Cómo puede ser esto? Wolf recurre de nuevo a su propia experiencia como ejemplo. Para él es prácticamente insoportable sentarse dando la espalda a un espacio abierto. Cuando se ve obligado a ello, necesita del 30 al 40 % de su energía mental para controlarlo, una carga que suele contribuir a que se considere que la eficiencia de las personas neurodivergentes es menor. “La eficiencia y la productividad de personas como yo se reducen mucho en situaciones en las que no se tiene en cuenta la neurodiversidad”, concluye. Diseñar espacios de trabajo inclusivos puede aliviar la carga de los empleados neurodivergentes y contribuir a que florezca todo su potencial. 

Acercar al mundo la experiencia de la neurodiversidad

Los tres cofundadores de swyvl: Philipp Wolf, director ejecutivo; la doctora Drea Letamendi; y Katie Mitchell, directora de experiencia.
De izquierda a derecha, los tres cofundadores de swyvl: Philipp Wolf, director ejecutivo; la doctora Drea Letamendi; y Katie Mitchell, directora de experiencia.

Estos retos animaron a Wolf y sus colegas a crear swyvl, una plataforma educativa de realidad extendida (XR o, en español, RE) para fomentar la empatía de sus usuarios haciendo que experimenten el mundo desde la perspectiva de la neurodivergencia. 

El eje vertebrador de swyvl serán breves pasajes de contenido a los que el usuario podrá acceder mediante una interfaz web o un casco de realidad virtual (RV). Estas escenas mostrarán extractos de la vida cotidiana (como ir al colegio o al gimnasio, o hacer las tareas domésticas), donde presentarán la experiencia visual, auditiva y sensorial del entorno y de la actividad tal como la viviría una persona neurodivergente. 

A estos fragmentos acompañará un conjunto de seminarios específicamente elaborados por profesionales en colaboración con un científico conductual. “Es una herramienta educativa ―explica Wolf―. Ayudará a la gente a aprender cosas sobre distintas experiencias de vida, a generar empatía y, eso esperamos, a aclarar las cosas frente a todas las creencias erróneas que rodean la neurodiversidad”. 

La idea es ir añadiendo escenas que ayuden a los espectadores a comprender cómo es el mundo para una persona neurodivergente. Los padres de un niño o niña autista podrán experimentar qué supone para él o ella ir al patio durante el recreo. Los jefes de una oficina podrán comprender exactamente por qué deberían cambiar el tipo de iluminación o facilitar un lugar de trabajo más tranquilo a alguien con alta sensibilidad al ruido. 

Wolf y sus cofundadoras, Katie Mitchell y la doctora en Psicología Drea Letamendi, ven un amplio abanico de usos para swyvl tanto en el mundo empresarial como en la sociedad en su conjunto. Además de hacer que familias, colegios y las propias personas neurodivergentes experimenten y contextualicen cómo ven el mundo, puede ayudar a las organizaciones a diseñar mejor los espacios de trabajo, enseñar a los profesionales de la salud cómo las distintas personas podrían responder a los tratamientos e incluso instruir a las fuerzas del orden y los tribunales de justicia sobre cómo tratar con una población neurodiversa.

Modelos de creación y consumo de RE

Imagen de la plataforma swyvl en un teléfono móvil con un casco de realidad virtual en primer plano.
La plataforma swyvl proporcionará simuladores de neurodivergencia para cascos de realidad extendida, pero también se ha diseñado para que funcione en dispositivos móviles, ordenadores portátiles e incluso televisores. Imagen gentileza de swyvl Canada Inc. Imagen gentileza de swyvl Canada Inc.

La accesibilidad es clave: aunque Wolf y sus socias están negociando directamente con fabricantes de hardware de RV para que swyvl se incluya como app de propietario en dispositivos como las gafas de Meta Quest, Apple Vision Pro, Samsung VR y HTC Vive, también se ha diseñado para que funcione en ordenadores portátiles, teléfonos móviles y televisores. 

Para que la inmersión sea aún más efectiva, están yendo más allá de la mayoría de las empresas de software para introducirse también en el hardware. Entre las tecnologías que hacen más vívida la experiencia de la realidad aumentada (RA) o de la RV en el mundo de la RE se encuentran sistemas de electroencefalografía que registran la actividad cerebral y prendas de ropa inteligente que simulan y hacen coincidir esa actividad con la experiencia en sí. Por ejemplo, si agarramos una manzana de RE, podremos sentir su forma y la presión que ejercemos sobre ella gracias a un guante háptico. 

El equipo quiere seguir trabajando en este campo, ya que fue un aspecto crucial en la experiencia inmersiva que creó Katie Mitchell como parte de su trabajo final de máster en la universidad, pero (sin perder de vista la accesibilidad) Wolf intuye que este tipo de hardware será más adecuado para docencia y formación en temas de salud mental y de empresa que para el público en general. 

Aunque la experiencia de algunos usuarios podría verse potenciada gracias al hardware, el rasgo distintivo de swyvl serán las escenas, fragmentos y películas de diversa duración con los que mostrar a los usuarios de primera mano cómo se siente una persona neurodivergente cuando interactúa con el mundo. La naturaleza audiovisual de este contenido también se debe al currículum de Wolf. 

Anteriormente trabajaba en el campo de los efectos especiales para entretenimiento, de modo que conoce los retos y las oportunidades que rodean al contenido de RE, tanto desde la visión creativa como desde la productividad en lo referente a la gestión de activos, flujos de trabajo y entrega de producto. 

En la empresa están utilizando Flow Production Tracking, de Autodesk, para gestionar, planificar rodajes y coordinar equipos y flujos de trabajo. Las escenas se grabarán a 360° en muy alta calidad. Los trabajos de posproducción y edición, para hacer que tanto la imagen como el sonido sean más fieles a la realidad de acuerdo con la neurociencia y los últimos avances en teoría conductual, se efectuarán con Maya, también de Autodesk.

Estudiante experimentando la realidad virtual en clase.
Además de su innegable papel en los lugares de trabajo, la plataforma de simulación de neurodivergencia de swyvl XR aportará a los docentes y a sus alumnos un mayor conocimiento de la neurodivergencia en entornos escolares y de aprendizaje.

Así lo explica Wolf: “Podemos extraer fácilmente la información de la imagen a partir de una representación tridimensional del espacio seleccionando elementos u objetos concretos. Por ejemplo, imagina que en el techo hay un tubo fluorescente que parpadea. Si está incorporado como nube de puntos en un espacio 3D, podemos usar Maya para convertirlo en un modelo tridimensional que luego podremos distorsionar para hacer que la luz sea más intensa o acelerar el parpadeo”. 

La última pieza del puzle es Autodesk Fusion. Lo están usando para esbozar y desarrollar hardware, como el chaleco háptico de swyvl. 

Uno de los elementos más ilusionantes de swyvl será el contenido privado generado por los usuarios, donde las personas neurodivergentes, sus padres o seres queridos filmarán su propia casa, escuela, lugar de trabajo o cualquier otro espacio y lo presentarán desde su perspectiva personal, lo que supondrá el relato más fiel de cómo viven las personas neurodivergentes. 

Dado que no cualquier persona es capaz de editar vídeo con calidad profesional, la inteligencia artificial (IA) será una herramienta crucial en esta generación de contenido por parte de los usuarios. Wolf puntualiza que no se puede hablar de verdadera inmersión si no se tiene en cuenta que la experiencia de cada cual es diferente: “Las herramientas de IA permitirán a los usuarios crear sus propias escenas con absoluto control de su privacidad. Bastará con seguir unas breves instrucciones en el dispositivo móvil, grabar un vídeo y dejar que la IA genere una escena inmersiva personalizada”. 

La biblioteca de escenas no dejará de crecer, por lo que desarrolladores y propietarios de licencia contarán con más contenido tanto para evaluar y diseñar espacios interiores y urbanos, videojuegos o contenido de entretenimiento como para expandir el conocimiento sobre accesibilidad neurodivergente.

Una gran diversidad de oferta

En un entorno sanitario, una mujer experimenta la realidad virtual.
La plataforma de simulación de swyvl XR también puede ayudar a que los profesionales médicos se familiaricen con las experiencias de los pacientes neurodivergentes.

El modelo de negocio previsto por swyvl cuenta con una oferta de productos estratificada. Wolf quiere que, en la medida de lo posible, el contenido de swyvl sea gratuito para el público general: “No podemos promover la accesibilidad si nosotros mismos no somos accesibles”. 

Otro nivel de servicio podría ser el de una organización u oficina que quiera formación periódica y certificación en neurodiversidad, de manera análoga a la instrucción en materia de seguridad de muchas empresas financieras o la obligada formación sobre cuestiones de higiene en las instalaciones hospitalarias. Al contratar el curso de actualización anual, swyvl permitirá a sus clientes seleccionar los ejemplos propios de su sector específico relacionados con el contenido del curso. 

Pero uno de los objetivos comerciales más importantes son los profesionales de salud mental. Wolf aspira a que psicólogos y psiquiatras adquieran una licencia para utilizar y monetizar el contenido de swyvl en su práctica profesional y ofrecerles un certificado de formación.

Un futuro neurodiverso

Aunque todavía se encuentra en fase de prefinanciación, una reciente subvención permitirá a swyvl construir un prototipo en los próximos meses. El objetivo a partir de ahora es lanzar el producto con diez escenas iniciales antes de terminar 2024. Según los datos que maneja la empresa, siete compañías incluidas en la lista Forbes Top-1000 han mostrado ya su interés. 

La empresa detecta una extraordinaria oportunidad de negocio, pero lo más importante es que también confía en desestigmatizar la salud mental y conseguir que las personas neurodivergentes puedan dar lo mejor de sí y sin trabas añadidas a sus empresas, a la economía y a todo el mundo. 

Wolf está convencido de que tal cambio beneficiará a todos: “Si analizas un poco la historia, verás que lo más probable es que algunos de los más grandes pensadores que han cambiado el mundo, como Albert Einstein o Nikola Tesla, fueran neurodivergentes”.

Drew Turney

Acerca de Drew Turney

De pequeño, Drew Turney quería cambiar el mundo, aunque luego comprendió que era más fácil informar sobre quienes lo consiguen. Escribe sobre tecnología, cine, ciencia, libros y mucho más.

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